Dalia Gutiérrez
Monterrey, México(03 mayo 2022).- En las profundidades de la Sierra de Picachos, lejos de toda actividad humana, hay un extenso bosque de enormes encinos, altas cañadas y cascadas que conforman una reserva natural con una misión especial.
Llamada La Mesa, es el lugar donde un equipo de expertos rehabilita ejemplares del lobo gris mexicano -una especie que fue erradicada casi por completo por el ser humano hace décadas- para que poco a poco pueda volver a habitar de forma libre en la naturaleza.
"Queremos que vuelva a haber lobos en libertad", expresa Sergio Jiménez, director de la Organización Vida Silvestre AC (Ovis), asociación encargada de la reserva apoyada por Vitro.
Ovis trabaja en conjunto con funciones diferentes, pero con un mismo objetivo en La Mesa: preparar lobos que puedan ser liberados de vuelta en un hábitat natural.
Sólo hay dos reservas encargadas de esta labor en México.
"Lo que necesitamos es poder liberar animales que tengan las habilidades para poder subsistir en el medio silvestre", detalla Jiménez.
En 2011 se hizo la primera liberación en todo México entre las sierras de Chihuahua y Sonora, una familia de seis que salió de La Mesa.
Tras 19 liberaciones en México, hay una población de 45 lobos en esta zona, mientras que en EU se contabilizaron 186 en 2020.
El éxito del programa se reflejó en 2019, cuando la especie dejó de considerarse "probablemente extinta" en vida silvestre para pasar a "en peligro de extinción".
La Mesa se extiende por 9 mil hectáreas de zona boscosa en el municipio de Higueras y es hogar de otras especies en peligro de extinción o de protección especial como el puma, oso negro mexicano, águila real, codorniz moctezuma y guajolote silvestre.
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