Atento Recordatorio

 

Colaborador Jesús Yurén

Querido Hermano en San Huberto:

Anexo el borrador de un manifiesto que proclamaremos las instituciones hermanas con motivo y en relación del desafortunado incidente de ‘Cecil’  Por favor léelo cuidadosamente y cualquier observación o sugerencia llévala a la reunión del Consejo de Gobierno.

Miércoles 12 de agosto de 2015

A LA OPINIÓN PÚBLICA,

A LAS AUTORIDADES DE FLORA Y FAUNA:

Condenamos de la manera más enérgica la reciente muerte del león Cecil, en las estribaciones del parque Hwange, en Zimbabue. Cecil era una bestia conocida y portaba un collar de telemetría alrededor del cuello para realizar estudios tendientes a ayudar a la población general de leones.

Estamos profundamente disgustados de que la persona que descuidada y alevosamente lo hizo, se llame a sí mismo ‘cazador’ cuando es tan sólo un gamberro sin ética ni preocupación por la conservación, características de un verdadero cazador.

No podemos dar una opinión sobre las leyes de fauna en Zimbabue, por desconocerlas. Sin embargo, si en la investigación se encuentra que se han violentado, el Departamento de vida silvestre de Zimbabue debe enjuiciar a los perpetradores con todo el peso y extensión de la ley.

Consideramos pertinente realizar algunas consideraciones que deben tomarse en cuenta sobre los beneficios mundiales de un uso adecuado, legal y regulado de la vida silvestre y no tasar a los verdaderos cazadores y manejadores de fauna, con ética y licencias, con la misma vara con la que se tasa a aquellos que entusiasta y voluntariamente evaden y rompen la ley, conocidos universalmente como FURTIVOS.

A) La conservación de la vida silvestre sin aprovechamiento, no es financieramente viable, es decir no es sustentable.

B) La caza de trofeos es una importante ayuda financiera y operativa para la sana conservación de la vida silvestre en toda su amplitud, sin privilegiar a las especies sujetas a aprovechamiento.

C) Las personas que conviven y cuidan de la vida silvestre deben beneficiarse directamente de esta cercanía y su uso para ser alentados a protegerla.

D) Frecuentemente, el aprovechamiento de la vida silvestre a través de la “caza legal y organizada” y el “furtivismo ilegal y sin control” son agrupados, por un malentendido, bajo el mismo paraguas de destrucción. ¡Nada más lejos de la verdad! Un director de banco no se agrupa junto con un ladrón de banco: el “manejo legal y con licencia” (manejo sustentable) y la “caza furtiva ilegal” (sin control ni ética alguna) están en extremos opuestos.

E) La mayor parte de las empresas de cacería establecen costosas y efectivas medidas en contra del furtivismo, motivadas por el deseo de conservar e incrementar la vida silvestre, materia prima de su operación, que depende de poblaciones sanas.

F) Desgraciadamente, la mayoría de los gobiernos no tienen los recursos financieros suficientes para la sana conservación.

G) Si por alguna razón, los montes fueran abandonados por los cazadores legales, éstos serían reemplazados de inmediato por furtivos. La tierra, muy posiblemente, deforestada y sobre pastoreada arruinando por años su uso para la fauna silvestre.

H) La prohibición de la cacería controlada, intentada por algunos países, ha tenido resultados catastróficos en detrimento de la fauna silvestre. Cuando la gente local no se beneficia de la fauna silvestre tiene la tendencia a no cuidarla o peor aún, a destruirla.

¡Sí! somos cazadores legales y manejadores de vida silvestre, como también somos acérrimos conservacionistas, en el verdadero sentido de la palabra (dando a la palabra “conservación” un significado de uso inteligente y sustentable en favor de la naturaleza y los animales, no sólo su protección). Repudiamos el uso ilegal de la fauna silvestre pero ejercemos el aprovechamiento cinegético como parte de su cuidado y herramienta de gestión.

Es tiempo de realismo en la conservación, sin sensiblerías que nublen la objetividad de la gestión. Es el momento para todos de trabajar juntos en beneficio de la fauna silvestre y los lugares donde habita que tanto amamos.

¡Cazar es conservar! ¡Conservemos la vida silvestre! ¡Preservemos la cacería legal!